sábado, 3 de agosto de 2013

Manchester United, la excelencia del "estilo Premier"

El té, el Big Ben, los hooligans, la música rock, la puntualidad, la ginebra... todos los tópicos posibles que se nos ocurran sobre el mundo británico, pero nada tan reconocido en el mundo del fútbol como el "estilo Premier". Muchas ligas a lo largo y ancho del mundo, sin embargo ninguna tiene un estilo tan marcado como puede ser la Premier League. Fútbol con transiciones rápidas, presión asfixiante y campos siempre llenos con la y aficiones muy cercanas a sus jugadores. Juntemos todo eso en treinta y ocho partidos y tendremos nueve meses de un fútbol inigualable. Y si alguien representa bien esta forma de entenderlo es el Manchester United. No tanto el equipo, sino su cabeza visible en los últimos veinte años, Sir Alex Ferguson. El éxito siempre ha sonreído al técnico escocés, pero el trabajo ha sido la tónica dominante para conseguirlo desde el primer momento. La aparición de una generación maravillosa también fue una gran ayuda para conseguir ese estilo, pero eso también es éxito del mánager por dar plena confianza a unos jugadores imberbes que apenas rozaban la veintena. Ese es el guión de la historia que marcaría el fútbol inglés a partir de principios de la década de los noventa. El resurgir de Old Trafford estaba en marcha cuatro décadas después de la muerte de los "Busby Babe". Era el tiempo de los "Fergie Babes".
David Beckham, Ryan Giggs, Paul Scholes, Gary Neville, Phill Neville y Nicky Butt han compuesto la generación de futbolistas más grandes que el mundo del fútbol recuerda en las últimas décadas. Un equipo glorioso que ha conseguido ganar Champions, ligas, FA Cups, Copas Intercontinentales y convertirse por derecho propio en el equipo más laureado de la historia del fútbol iglés. Y todo ello con un estilo muy definido: salida rápida desde atrás, llegada al área en marea y presión asfixiante para la recuperación. Balón jugado del portero para Gary Neville en el lateral derecho, salida con Roy Keane, enganche con David Beckham o Ryan Giggs, juego de espaldas de Van Nistelrooy y llegada al área de Paul Scholes para fusilar a todos los porteros de Europa. Hemos visto una cantidad incontable de goles con esa jugada y muchos han servido para llevar a las vitrinas de Old Trafford todos los títulos anteriormente mencionados. Los mismos protagonistas con algunos invitados de excepción como Juan Sebastián Verón, Cristiano Ronaldo, Eric Cantona, Nani, Rooney o Van Persie. Esa ha sido la tónica  reinante en el fútbol de los últimos veinte años. Ahora se ha acabado la era Ferguson y David Moyes tiene que tomar el relevo y demostrar que puede crear una nueva dinastía en Old Trafford. El tiempo tendrá la última palabra para elevar a lo más alto a los "Fergie Babes"

martes, 23 de julio de 2013

"El Tata", un bielsista convencido

"Ve y pegala tú, Tata, carajo". Esa frase escucharon todos los aficionados que se congregaban aquella tarde en el Parque de Independencia, ese estadio que ahora conocemos como Estadio Marcelo Bielsa. Newell's Old Boys recibía a su rival más directo por el título, Boca Juniors. El equipo bonaerense venía de proclamarse campeón del torneo apertura de ese mismo año y quería revalidarlo en el torneo clausura, pero en Rosario no iban a permitírselo. Marcelo Bielsa se había embarcado en la aventura de dirigir a un equipo con una mezcla explosiva entre jugadores muy jóvenes y jugadores con una gran veteranía. Pochettino, Gamboa, Berizzo, Berti... eran las apuestas arriegadas de "El Loco" procedentes de la B de "La Lepra". A todos estos jóvenes se unían dos jugadores que rondaban la treintena que venían de ser grandes estrellas en el fútbol argentino como Llop y Martino. Precisamente este último era la clave de aquel equipo. "El Tata" era el alumno aventajado de Marcelo Bielsa y no tardaría en demostrarlo tras su retirada. Esa frase con la que empezábamos podría reflejar perfectamente el traspaso de poder que "El Loco" le haría a su pupilo y que este no estaba dispuesto a rechazar.
"El Tata" no iba a desaprovechar el legado que le había dejado Bielsa en su etapa como jugador de Newell's. Las charlas anteriores a los partidos de aquel año 92 se convertirían en una de las motivaciones esenciales que marcarían a Martino como entrenador. Esa solamente sería una de ellas y no la principal, porque había una por encima de todas: el amor incondicional por "La Lepra". "El Tata" no podía vivir su carrera de técnico sin dirigir al equipo de su corazón y proclamarse campeón como había hecho su maestro. El estadio Marcelo Bielsa sería testigo del éxito de "El Tata" esta última temporada. Ese éxito es precisamente el que le ha abierto las puertas de uno del mejor equipo de los últimos tiempos. La inoportuna recaída de Tito Vilanova en su enfermedad es quien ha dejado un hueco en el banquillo del Camp Nou que Martino tiene que mantener ese hambre de títulos en la Ciudad Condal. Para ello, "El Tata" tendrá un elenco de estrellas capitaneadas por Leo Messi, un leproso como él, acompañado de Andrés Iniesta, Cesc Fábregas, Xavi Hernández, Gerard Piqué y el recién llegado Neymar. La intensidad en la presión en la recuperación de balón, el juego combinativo empezando por el portero, la obsesión extrema por el rigor táctica... son las señas de identidad que hemos visto en Olimpia, Cerro Porteño, Newell's Old Boys o la selección de Paraguay. Todo eso tendrá que poner en práctica "El Tata" para mantener al Barça en la cabeza del fútbol europeo y solo así podremos decir que una vez más el alumno ha superado al maestro.

miércoles, 10 de julio de 2013

Las dos orillas del Merseyside buscan la revolución

Liverpool vivió sus años de máxima excelencia con la irrupción de The Beatles en los años 60. Los miles de fans abarrotaban las calles cada vez que aquellos cuatro jóvenes con pelo largo, trajes oscuros y corbatas estrechas se dejaban ver por la ciudad del Merseyside, pero no sería la única edad dorada de la ciudad inglesa. En los años 80, Liverpool volvería a vivir su pleno apogeo, pero esta vez sería el fútbol quien llamase la atención de sus habitantes. Gary Lineker se convertía en el gran ídolo de la afición toffee mientras Kenny Dalglish se ganaba el corazón de la hinchada red. Sin embargo, todo eso ha cambiado. El Liverpool ya no es ese equipo arrollador de las décadas de los 70 y los 80 sino que se ha convertido en un equipo destinado a luchar por entrar en los puestos de Europa League mientras el Everton tiene que tratar de reinventarse con la marcha de David Moyes a Manchester.
El Liverpool quiere recuperar su estela de grande en la Premier y Brendan Rodgers parece que es la mejor opción para conseguirlo. La segunda temporada tiene que superar las sensaciones de la primera donde el equipo acabó practicando un fútbol espectacular, pero los resultados no acompañaron como deberían. La afición red ha decidido entregarse al ex técnico del Swansea para reconducir la situación del conjunto red. Los españoles han vuelto a tomar el terreno de juego de Anfield con la llegada de Iago Aspas para poner la garra y el gol en la mediapunta y Jose Alberto para ser un puñal en la banda izquierda. La salida de Luis Suárez parece inminente por lo que desde los despachos del Liverpool han puesto la máquina a funcionar para buscar un buen delantero que supla la baja del uruguayo. Benteke es la opción preferida, pero el Tottenham también tiene el ojo puesto en el delantero del Aston Villa. Steven Gerrard sigue siendo el timón del equipo y Suso es la gran esperanza de futuro junto a Coutinho. Llegar a los puestos de Champions es la gran obsesión de esta temporada en esa orilla del Merseyside.
La otra orilla del río que cruza la ciudad de Liverpool también está tratando de asentar su nuevo proyecto tras la marcha de David Moyes rumbo a Manchester. Son once años bajo el mando del escocés con la afición de los toffees entregada, pero su predecesor no es ningún novato en la Premier. Roberto Martínez se ha ganado un puesto en la élite de los banquillos ingleses a base de trabajo y táctica en los banquillos de Swansea y Wigan. Bob es la máxima expresión del entrenador obsesionado con los conceptos tácticos y Goodison Park es una gran plaza donde demostrarlo. El entrenador español se ha rodeado de viejos conocidos en su nuevo proyecto con la llegada de Arouna Koné para darle mordiente y gol a un equipo que nunca ha destacado por el exceso de gol de sus delanteros y la más que posible incorporación del jóven Joel Robles para defender la portería como ya haría en la segunda vuelta de la pasada temporada en el Swansea. Sin embargo, el gran éxito de Bob es la cesión de Gerard Deulofeu procedente del Barça. La joven perla de La Masía llega a la ciudad de The Beatles para poner la velocidad y el desborde desde el flaco izquierdo y confirmarse como la gran estrella que ansían en Barcelona. Los viejos rockeros como Osman o Jagielka siguen formando la espina dorsal de un equipo preparada para dar guerra a cualquiera que visite Goodison Park.
Liverpool quiere recuperar las grandes luces de los años 80 y la llave queda en las manos de Roberto Martínez y Brendan Rodgers. La revolución en las orillas del Meyreside ha comenzado.

martes, 9 de julio de 2013

Simeone: director de un conjunto de cancheros

Parece difícil. pero la directiva del Atlético de Madrid alguna que otra vez aislada tiene sus aciertos, Simeone es el mayor en los últimos quince años. Nadie conoce el club tan bien como El Cholo y nadie puede imponer esa garra que exige el público de El Calderón como él. La palabra exacta para definir al entrenador del Atleti es una que les gusta mucho utilizar en su tierra argentina: canchero. Es difícil encontrar una definición concreta para la palabra canchero, pero sería algo así como un jugador con la lucha como principal rasgo de su fútbol y que se convierte en ídolo de la hinchada. El Cholo representaba eso como jugador y no puede esconderlo en su etapa como entrenador. Su paso por el Monumental, "La Academia" y Catania forjaron un sistema muy definido con la entrega y las salidas rápidas como principales características, es decir, el vivo ejemplo del propio Simeone en su etapa de futbolista. El Atleti era el mejor escenario para presentarse ante el gran público y su influencia hoy por hoy es insuperable. Hace un año y medio, los colchoneros eran un equipo apagado, sin fútbol y sin ambición, El Cholo se encargó de cambiarle la cara a ese equipo y hacerle campeón de Europa League y Copa del Rey. Sin embargo, el verdadero reto se presenta esta temporada con la marcha de futbolistas importantes y con la vuelta a las grandes luces de la Champions League donde el Atleti tiene que mostrar una imagen cuanto menos digna.
La marcha de Falcao ha dejado un hueco enorme en la delantera del conjunto colchonero, pero la llegada de un goleador nato como David Villa crea un halo de esperanza para el nuevo proyecto de Simeone. Todo el mundo esperaba el desembolso de una cantidad importante para hacerse con un delantero centro, pero El Cholo parece que tiene una idea un poco diferente. La llegada de Villa, el surgimiento de Diego Costa, la más que esperada recuperación de Adrián y la posible llegada del Papu Gómez parecen ser las opciones de este nuevo Atleti para la parcela goleadora. Simeone está convencido para gastarse el dinero en un mediapunta de calidad. Diego Ribas es el favorito, pero sus pretensiones económicas se presentan demasiado elevadas para el Atleti, por lo que los argentinos toman fuerza para reforzar esa posición. Nico Gaitán, Erik Lamela y Gio Moreno son las opciones que más gustan al técnico rojiblanco. Los dos últimos son viejos conocidos de Simeone que les dio plena confianza en River y Racing. Por su parte, Nico Gaitán es la viva imagen de eso que llamábamos cancheros y en Lisboa pueden dar buena cuenta de ello. Esas son las opciones colchoneras, pero Simeone se guarda un as en la manga: Óliver Torres. El canterano es la gran joya del Atleti y El Cholo quiere darle la alternativa esta temporada convirtiéndole en el motor del equipo colchonero.
Muchas opciones y una sola solución para El Cholo, que una temporada más tendrá que luchar contra todos los elementos a pesar de la lamentable gestión de los despachos rojiblancos.